Profesión: Pedagoga
Ámbito de intervención: Social
Área de especialización: Entidades sin ánimo de lucro
Entidad en la que trabaja: Autónoma (Sevilla, Andalucía)
En qué consiste su trabajo: En diseñar, implementar y evaluar proyectos educativos y sociales que den respuesta a las necesidades identificadas por las organizaciones con las que colaboro. En los dos últimos años he puesto en marcha proyectos en la Asociación de Mujeres por la Formación y el Empleo en Sevilla, he colaborado en la elaboración de varias publicaciones con IC Editorial y he desarrollado materiales didácticos para Mundo Solidario.
Retos a los que se enfrenta trabajando en su ámbito: Por una parte hacer valer mi trabajo y poner en valor lo que puedo aportar a las organizaciones con las que colaboro. Por otra parte la falta de financiación pública ha mermado mucho la capacidad de acción de las entidades sin ánimo de lucro, y a su vez, una gran mayoría de estas no han trabajado en profundidad la financiación privada, por lo que se encuentran en situaciones muy complejas para continuar con su labor y ayudar a las personas. Además en España no es muy habitual ser emprendedor si te dedicas al sector educativo y/o social, por lo que los que nos animamos no tenemos formación en el ámbito empresarial y los negocios, lo que constituye una importante limitación. Hay que formarse mucho y muy bien para saber gestionar clientes, facturas, darse a conocer de la forma correcta, etc. con la consecuente inversión de tiempo y dinero. ¿Significa esto que es imposible ser pedagoga y freelance? No. Es difícil y duro, pero no imposible : )
Qué le apasiona de su profesión: Es difícil concretar en pocas palabras lo que me apasiona de esta gran profesión, porque realmente me encanta mi trabajo. Es muy gratificante cuando ves que un proyecto que has puesto en marcha o en el que has colaborado permite mejorar determinadas situaciones sociales en el entorno en el que se ha implementado. También es muy satisfactorio transmitir ideas y promover el aprendizaje en cadena. Los conocimientos, las actitudes y los valores en los que crees se van transmitiendo de unas personas a otras y surgen nuevas iniciativas encaminadas a seguir mejorando la realidad en la que vivimos. Es la semilla del cambio y verla crecer y florecer es bonito.